Creo que más allá de la seriedad de una página web, lo que más necesito para entrar en contacto con mis clientes, mis amigos y el público en general es un blog como éste, ya que precisamente las prisas del día a día restan protagonismo a los comentarios que suscitan algunas imágenes fotográficas. Y es que, algunas fotografías, como ocurre con los hechos cotidianos, merecen una atención especial porque sí, porque nos gustan, porque nos conmueven o simplemente porque nos recuerdan a personas queridas o a situaciones memorables.
Este blog pretende ser el cajón de sastre de mi trabajo diario, en el que probablemente podrán verse imágenes de distintos eventos sociales en los que siempre habrá algo que los diferencie del resto; no hay dos bodas iguales, ni dos reportajes de estudio idénticos. La chispa de quien se coloca ante mi objetivo, la anécdota del novio o el despiste del padrino muchas veces van más allá y quedan plasmados en la retina, en el papel fotográfico y en la pantalla del ordenador, es decir, lo que pude captar con mi cámara en un momento determinado servirá para la posteridad y será la esencia de los momentos más especiales de nuestras vidas. Esa esencia del instante es la que se verá en este blog, más allá de formalismos técnicos.